Coatepec se ilumina con la magia del desfile navideño.

Nos encontrábamos por las calles de Coatepec, el 15 de diciembre del 2024. Todo el centro se iluminó como el cielo lleno de estrellas, todas las luces y los sonidos envolvían al amado Pueblo Mágico. Todos estábamos ahí por una razón, el Desfile Navideño 2024. Desde la fría mañana, se comenzaba a sentir la magia de la época decembrina, la emoción en el aire era abundante, como si el pueblo sintiera el calor y la expectación de todos sus habitantes, como si estuviera listo para abrirse de brazos y recibir a todos para celebrar. Parejas, grupos de amigos y familias enteras comenzaron a llegar de todas las direcciones sin parar, las autoridades cerraron calles y se tupieron de todas las personas, las banquetas y el parque se encontraban llenos, todos llegaron buscando el mejor lugar para disfrutar del desfile.

Los responsables de realizar el bello desfile son "Unidos por la Magia Coatepec". Las primeras tonadas comenzaron a sonar, la música navideña marcó el inicio del paso de caravanas. Desde todas las calles se lograba escuchar el ritmo de los tambores y el claxon de los coches, los carros alegóricos encendían el paso y las fachadas de todos los edificios del pueblo. La organización del evento fue perfecta, logró que los participantes avanzaran con gran fluidez, cosa que pocas veces se ha visto, muchos desfiles han tardado mucho por la mala organización provocando mucho tráfico, así que se llevaron ese punto a favor, además de que cada carro mostraba su propia historia.

Al caminar junto al desfile al ritmo de la música, noté la atmósfera repleta de la alegría que contagiaban tanto los presentes como el desfile. Todo un entorno muy colorido, parte de esto fue gracias a los niños, quienes agitaban globos de colores y llevaban encendidas varitas de chispitas, sus sonrisas eran inigualables. Los aplausos de los adultos hacían un estruendo que alentaba los participantes. Algo muy bonito fue que, si bien las personas sacaron sus celulares y se detenían para tomar videos y fotos, durante casi todo el evento simplemente se dejaron llevar por el momento disfrutando del espectáculo.

El detalle y la dedicación en la realización de los trajes y las decoraciones fue sublime. Los colores tan vibrantes con sus detalles brillantes daban un toque que lograba transmitir el espíritu navideño a la perfección. Los carros usaban muchos diseños bastante creativos que destacaban la pasión acompañada del esfuerzo de los que trabajaron en ellos. Cada grupo tenía su propia manera de interactuar con el público y motivarlos a aplaudir, haciendo la experiencia más íntima.

Conforme el desfile avanzaba, el espacio se llenaba más y más, son embargo todos se mantenían respetuosos dejando delante a los niños y adultos mayores para que pudieran disfrutar al máximo la experiencia. Todo Coatepec se encontraba fuera de sus casas, muchas personas se encontraban y se saludaban felizmente al coincidir entre la multitud. Un desfile no es un desfile sin comida, los vendedores ambulantes ofrecían a los presentes algodones de azúcar, papas, churros y elotes, el aroma de recorría todo el ambiente, imposible no caer ante el antojo.

El momento más emblemático fue cuando llegó el carro principal, encima se encontraba un Santa Claus espectacular rodeado de renos decorados y luces doradas. El nivel de dedicación se notaba completamente, la emoción que generó fue increíble, todos gritaron con enjundia y alegría. Los aplausos se intensificaron, era evidente que el clímax había llegado, una noche que estaba cerrando con un gran broche de oro.

Al finalizar el desfile, la gran masa de gente comenzó a disiparse, pero la energía de todos seguía latente entre toda la comunidad. Se escuchó a un niño gritarle a su madre que estaba muy feliz y que el Santa Claus le había gustado mucho, estos momentos te hacen pensar en cómo eventos así logran crear memorias y sensaciones para toda la vida, despiertan el cariño y la magia de la navidad, inician las fechas decembrinas en lo más alto.

El desfile fue toda una experiencia que conectó a todos los coatepecanos y extranjeros que asistieron. Sin duda lo que más marcó el desfile fue el ambiente que generaban todos, tanto los que lo presenciaron como los participantes, ese calor humano que hace toda la diferencia y lo vuelve todo más especial.